El Cid y Vargas salen a hombros, mientras Rincón y Castella salvan la corrida

Calafia

Ejecución de banderillas a la «calafia» de Sebastián Vargas, uno de los mejores pares colocados en la larga historia de nuestra plaza de toros.

El Cid y Sebastián Vargas salieron a hombros al término del largo festejo celebrado este domingo en la colombiana plaza de toros de Cartagena de Indias. Ambos pasearon dos orejas -una de cada ejemplar de su lote- en un espectáculo en el que Iván Fandiño malogró con el acero la mejor faena de la tarde. Sebastián Ritter, por su parte, tocó pelo del astado que cerró plaza.

Se lidiaron cuatro toros de Ernesto Gutiérrez (3º, 5º, 6º y 8º) y cuatro de Las Ventas del Espíritu Santo, desiguales de presentación y juego. Algunos con poca cara.

Sebastián Vargas, oreja y oreja; El Cid, oreja y oreja; Iván Fandiño, ovación y ovación; y Sebastián Ritter, palmas y oreja. Entrada: Un cuarto.

La corrida se inició con dos horas de retraso debido a inconsistencias en el cumplimiento de las obligaciones del empresario Germán Pareja. Gracias a la gestión de los matadores César Rincón y Sebastián Castella, principalmente, se superaron los escollos y tanto matadores como banderilleros y picadores pudieron dar el paseillo.

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