Por John Zamora (Director Revista Zetta).- Al concluir las pasadas sesiones ordinarias en la Asamblea Departamental, se supone que los diputados volverían a verse en las de octubre o, de modo excepcional, si antes se llegase a convocar a extras. Pero no. Las “sesiones” han seguido.
Pero no son sesiones para estudiar los proyectos de ordenanza que proponga el Ejecutivo, sino para un proyecto político que tiene nombre propio: la Presidencia de la Duma.
Dos nombres son los que han surgido y que se han ido ambientando, para darle cuerpo a una coalición con los números suficientes para imponerse en las ordinarias de octubre, cuando teóricamente se debe elegir la Mesa Directiva 2017.
Ambos son nuevos en la Asamblea pero provienen de sectores con mucha historia. Por una parte el liberal José Hilario Bossio, ex alcalde de Arjona, ex Secretario del Interior de Bolívar y quien es asociado con el ex senador William Montes, quien no tiene curul pero si rango político de congresista.
Por otro está Frank Ricaurte, partido de la U, heredero de la curul que por más de 30 años tuvo su padre Andrés Ricaurte Armesto.
Bossio puede argumentar que fue incondicional en la campaña que eligió a Dumek Turbay como gobernador, en tanto que Ricaurte estuvo en la otra orilla acompañando a Yolanda Wong. No obstante, la campaña quedó atrás en octubre pasado, y Ricaurte puede mostrar su liderazgo como presidente de la Comisión del Plan, donde precisamente se impulsó el plan de desarrollo “Bolívar Si Avanza”.
De momento no hay una ventaja clara, pero se anticipa que el empate no perdurará mucho tiempo.
Con Bossio estarían los diputados Andrés Montes, Libardo Antonio Simancas, Jorge Redondo y Verónica Payares. Con Ricaurte estarían Ignacio Becerra, Víctor Mendoza, Miguel Cuéter, Manuel Berrío y Carlos Fernández. Faltarían Elkin Benavides y Mario del Castillo, que han tenido acercamientos y están bastante cerca de una decisión, y Jorge Rodríguez Sosa, quien no se encuentra en Cartagena y todavía no ha recibido “carta de invitación” de los candidatos.
En el proceso no ha intervenido el gobierno del Bolívar Si Avanza, y el gobernador ha dado pruebas de no meterse para nada en las dinámicas internas de la Asamblea.
Ambos candidatos se han mostrado afines a la armonía entre Ejecutivo-Duma, y la relación con el gobierno seguirá en ese tono cooperativo, por lo que está en juego es un mero pulso de liderazgo interno.
Desde luego, hay cartas todavía por jugar como las Vicepresidencias y la Secretaría General, que contribuirían a inclinar la balanza.
Tiempo todavía hay para conformar esa mayoría necesaria, y lo que si parece descartado es una tercería, en caso de que ninguno de los dos candidatos “cuaje”. Pues ambos están afinando sus notas para presidir la Asamblea.
