Las más significativas derrotas están en los senados de Sandra Villadiego y Antonio Correa, y en la lista de Cámara de Centro Democrático.
La derrota de Antonio Correa es muy dolorosa porque se ahoga con casi 70 mil votos, lo que demuestra que hizo la tarea, que tiene electorado. Lo que pasa es que estuvo casi solo en un partido que se desdibujó y no alcanzó el umbral.
Sandra Villadiego pierde porque se quedó sin oxígeno en Bolívar y la estrategia de votos exógenos no funcionó.
Recordemos que se “echó al hombro” la candidatura a Gobernación de Yolanda Wong y salió derrotada, y de esa batalla no se recuperó. Perdió a su concejal William Pérez, que se fue con García Zuccardi, al igual que la mismísima Wong. Su alianza con Montes se desintegró, y no pudo cuajar otra alianza para Cámara en Bolívar. Además, las denuncias sobre Odebretch, así sean infundadas, sembraron desconfianza entre algunos electores.
La votación a Cámara de Centro Democrático, si bien subió en conjunto, desdice de sus componentes individuales: Las fuerzas del Pastor Arrázola son limitadas y no pudo elegir a su hermana Marta; de Jorge Lequerica poco queda; los nuevos como Juliet Jiménez y Alberto Cure no “pegaron”, y el veterano Éder Flórez puso una votación ridícula; Javier Otero se quedó cortó. Hay que tener mejor sintonía con el electorado y los medios, es equivocado fincar toda la estrategia en Facebook y Twitter, sobre todo en un departamento como Bolívar.
El resultado de Senado en Bolívar para Fernando Araújo (12 mil votos) indica que no votaron por él, sino correspondieron bien a Álvaro Uribe, bien a fuerza exógenas.
