Múnera, Córdoba y Bustillo – Análisis de John Zamora

David Múnera Cavadía es un político respetado porque tiene ideas y es consecuente con ellas.

Agradeció a sus más de 12 mil votantes por apostarle al cambio y la transformación de la ciudad, y sin pelos en la lengua, como es un carácter, dijo que “con Quinto Guerra volvimos a perder”; “volvieron a ganar los financistas, las mismas casas tradicionales y el partido de los contratistas”; “no tengo que necesitar una bola de cristal para saber que la ciudad seguirá empeorando su situación económica, social y política”.

¿Por qué no gana? Porque es un candidato del siglo XX, es decir, tiene discurso pero no está sintonizado con los nuevos tiempos; porque es muy bueno con el diagnóstico, pero no brinda confianza como ejecutor, pues nunca lo ha sido, unido a que es de un partido de comprobados malos gobiernos en otras ciudades, como Bogotá; porque tiene una organización política pequeña y estable, pero incapaz de crecer en Cartagena; porque genera temores en un establecimiento que prefiere votar por otros; porque le faltan recursos financieros, entre otras razones.

El “primíparo” Armando Córdoba fue el caballo de Troya del petrismo, que se camufló en el partido Verde y logró la postulación por encima de figuras locales avaladas por Fajardo, Claudia López o Sanguino; sacó la mitad de los votos que Múnera, resultados que lo invitan a estudiar más para elevar el nivel de su lingüístico discurso. Para él resultará muy satisfactorio haber superado por casi dos mil votos a Javier Bustillo.

A propósito, para Córdoba puede que sea una cuota inicial, pero para Bustillo bien puede ser el cierre de una dilatada carrera política, deficitaria en lúmenes, ya que con los 4.731 votos no le alcanzará siquiera para aspirar de nuevo al Concejo, pues esa cifra no se traslada sino decrece cuando se cambia de objetivo. La campaña de Bustillo no gustó porque se basó en el regaño social y político, y la gente se preguntaba: ¿Y a este quién le otorgó la superioridad moral para venir a regañarnos, sobre todo montado en la silla de varios años en el Concejo?