Los tres “strikes” que poncharon a Clara Calderón

Análisis de John Zamora (Director de Revista Zetta).- Lo corriente es que a un funcionario de primer nivel se le pida la renuncia, no que se le declare insubsistente. Así que varias gotas debieron rebosar la copa de la paciencia del alcalde Pedrito Pereira como para firmar el decreto que cesó a Clara Calderón de la Secretaría de Infraestructura.

La renuncia fue solicitada desde mediados de la semana pasada y la espera no podía ser indefinida. Así que en vista que la misiva no llegó, el decreto afloró a primera hora de este lunes.

¿Qué pasó? ¿Por qué se erosionó la relación entre el alcalde y una funcionaria curtida en el sector público?

El Palacio de la Aduana no quiso ahondar en explicaciones. Simplemente informó que “al ser un cargo de libre nombramiento y remoción, es una decisión discrecional del alcalde en el marco de sus competencias”.

El alcalde Pedrito Pereira tampoco entregó detalles, y simplemente señaló que requiere una nueva dinámica en esa área de la administración.

 

Los tres strikes

Clara Calderón ha tenido una dilatada carrera en el sector público, incluso fue concejal de Cartagena, y se le asocia con el sector político de la Casa García Zuccardi.

En la más reciente etapa de su servicio público, llegó como asesora del alcalde Manolo Duque para estructurar megaproyectos, como la defensa costera o el plan de drenajes pluviales. Con Sergio Londoño, ya como Secretaria de Infraestructura, tuvo un desempeño muy dinámico, se le veía trabajando de sol a sol, y se mantuvo con Quinto Guerra y Yolanda Wong.

Pero con Pedrito Pereira las cosas simplemente no fluyeron. Incluso ni en fotos de redes sociales de los actos oficiales se les veía. Solo hay una foto, un mes después de posesionado Pedrito, en una reunión con gremios (la que ilustra esta nota); de resto, no hay una obra de Infraestructura a la que el alcalde haya asistido para inaugurar o inspeccionar.

Estos pudieron ser los tres “strikes” que la poncharon:

Primer Strike: fallida gestión de la licencia de construcción del San Felipe Neri…

Segundo Strike: decisión de Procuraduría de suspenderla por su gestión anterior en Valorización…

Tercer Strike: Informe de Funcicar sobre anomalías en contratos de parques…

Veamos:

Primer Strike: Uno de los chicharrones más sensibles que heredó Pedrito Pereira fue la construcción del nuevo colegio San Felipe Neri, cuyos trabajos ya están en marcha, pero que tuvieron asombrosos tropiezos. Por ejemplo, bajo la administración Manolo y siendo secretario de Infraestructura Wilson Herrera, se adelantó una licitación pero con enormes fallas de planeación. Por ejemplo, no estaba clara la titularidad del predio ni tenía licencia de construcción. El caso llegó a manos de Calderón y cuando el alcalde Pereira pensaba que todo se había solucionado, reventó el problema de la licencia de construcción con la Curaduría Nº1, pues el Distrito no entregó todos los documentos exigidos, y tuvo que desgastarse personalmente pidiéndola de nuevo.

Segundo Strike: De la Procuraduría llegó una sanción de suspensión en primera instancia, por dos meses, contra Clara Calderón por una “culebra” de cuando fue directora de Valorización Distrital, en el gobierno de Campo Elías Terán. Ella interpuso recurso y adujo que las inconsistencias se cometieron en el gobierno anterior, de Judith Pinedo. El recurso interrumpió la sanción, pero la espada de Damocles estaba ahí. Sin duda, esto es lo que más pesó.

Tercer Strike: Aunque la situación de Infraestructura ha sido motivo de cierta crítica al gobierno de Pedrito Pereira, uno de las explicaciones es que las necesidades superan con creces a los recursos disponibles. El problema es que lo poco que se gestiona, ha tenido tropiezos. Ese es el caso que denunció Funcicar, de tres parques contratados por mínima cuantía y que rondaron $190 millones, licitados por Infraestructura. “La falta de planeación termina en mala ejecución”, dijo la entidad privada.

Una vez cesada Clara Calderón, ahora el alcalde deberá buscar a una persona con mucha dinámica que le acompañe en la Secretaría de Infraestructura en lo que le queda de encargo, y no se sabe si necesariamente provendrá del mismo sector político que representaba la ahora exfuncionaria. De lo que se ha visto, el alcalde no tiene un criterio politiquero, así que el reemplazo seguramente estará al servicio de la Alcaldía y no de una causa sectorizada.